Un nuevo capítulo se inició en esta polémica historia, donde Marina Morales denunció que el 27 de julio del 2020 se abrió la tumba de su padre sin el consentimiento de los familiares directos.
En ese sentido, contó
que recibió un correo de la Contraloría, donde se le informa que la
Municipalidad de Curicó no ha respondido las consultas para despejar las dudas
en este caso. “Pido que el señor alcalde sea un poquito más ágil y responda. En el correo que me llegó dice
que tiene plazo hasta el lunes 29 de diciembre”, dijo.
La denunciante le
recordó a la máxima autoridad de la comuna que su caso no es juego, sino que
una presunta irregularidad muy grave.
“Mi problema es tan
delicado como los que ustedes ahora están demandando en contra del señor
Roberto García Parra por platas mal habidas”, acotó.
En ese contexto,
solicitó que se mida con la misma vara su caso y se investigue a fondo. “O sea,
es más importante demandar a una persona por dinero que abrir una tumba de un
familiar sin consentimiento”, alegó.
Sin respuesta
Marina Morales contó que en varias ocasiones ha tratado de concretar una reunión con el alcalde George Bordachar y el jefe jurídico del municipio, Felipe Canteros, pero no ha tenido éxito. “Para que me den las explicaciones correspondientes, pero no lo han hecho. No respondes correos, no me reciben a mí ni a mi abogada. No sabemos en qué está el caso”, se quejó.
Por tal motivo, todas
sus esperanzas están en la Ministerio Público, donde presentó los antecedentes
y se designó un fiscal para que investigue. “Espero que haya justicia moral y
emocional, que es lo que más me interesa”, puntualizó.
Marina Morales emplazó
al municipio a mostrar públicamente “donde están los documentos, que dicen
tener, para haber abierto esa tumba y no lo hacen porque no tienen nada”,
aseguró.
