Preocupación han mostrados las autoridades regionales ante el nuevo sistema frontal, ya que tendría características similares al registrado en junio y que desató una verdadera catástrofe en una vasta zona del país y, en especial, el Maule con cortes de caminos y anegamientos.
Por lo motivo, sesionó una mesa técnica preventiva del Comité de Gestión del Riesgo de Desastres (Cogrid) para monitorear la evolución del evento y su pronóstico.
Se decretó una alerta preventiva en las 30 comunas del Maule y, además, se activó el sistema de protección civil y de emergencia.
Atentos
La inquietud principal radica en que la nieve acumulada bajo los tres mil metros de isoterma se podría transformar en agua y ésta a su vez, aumentar los caudales de ríos y canales de regadío, con la probabilidad de desbordes e inundaciones.
Según Carlos Bernales, director regional del Servicio Nacional de Prevención y Respuestas ante Desastres (Senapred), las cuencas hidrográficas de Curicó y Linares presentan una alta vulnerabilidad, así como también merecen especial atención los ríos Teno, Maule y Claro.